Y Marian y yo estábamos realmente histéricas con la coreo de sable. Era la segunda vez que la hacíamos y la anterior a ella se la cayó el sable y le cogió miedo; y esa misma mañana, cuando la estuve repasando se me cayó dos veces a mí . ¡¡Creía que me iba morir!! Igual me había centrado demasiado en mi katana y había olvidado el sable y ahora él se vengaba de mí... :(
Y la coreo nos salió perfecta... pero respiré cuando ya me quité el sable de la cabeza. ¡¡¡Qué fuerte!!! Estaba más preocupada de esta coreo, que de la siguiente que era mi primer solo. Aunque me encantó cómo íbamos vestidas, con los sujes de monedas ( yo estrené el que me compré en Barcelona) y los guantes rollo góticos en una mano.
Y después estrené mi coreo y ya me dió el subidón. Y he de decir que me inventé algunos pasos, cosa que me alegra, porque lo resolví sobre la marcha y que no me agobié ni nada de nada, sino todo lo contrario. Me gusta estar ahí arriba y que mi corazón bombee más fuerte cuando suena la música. Y aunque bailaba sola me sentí muy acompañada. Mi Maestra estaba ahí, al ladito, a mi izquierda y yo la sentía. Mira que me pone nerviosa bailar delante de ella, o ensayar, o cuando le enseñé mi coreo por vez primera creía que me daban palpitaciones, no sé me da taaaaaaaaaanto respeto cuando me observa con esas pestañas taaaaaaan largas, pero esta vez...agradecí que estuviera bien cerquita. :)))))
Y el resto de la actuación fueron idas y venidas, corriendo por una calle, pa cá y pa allá, jijiiji, y subidón, subidón, súper subidón y claro, borrachera total de estar muy feliz porque te llena mucho lo que estás haciendo, lo que estás viviendo.... que es Bailar.
Y cuando aparece el verbo BAILAR no puedo más que pensar en ella y en lo que he disfrutado esta actuación, y en especial esta canción, la mía, este blog, que tiene su nombre sabe de lo que hablo ( ¡y vosotras que me leéis!) y es que todo se une para cobrar más fuerza, más importancia... Porque la de veces que hemos bailado y la de bailes que hemos hecho juntas, en el mismo escenario, pero es que nunca había bailado a su lado... Antes me servía una foto, ahora quería más y ese MÁS era sentir a su lado lo que hace que me llene de vida, lo que ella me ha enseñado. Quería compartir una mirada, una sonrisa, un momento de desconcierto... Es algo tan precioso que no me da la gana callármelo en el fondo de mi corazón por vergüenza. Es más, avisé a Celeste que por favor, me hiciera esta foto, que me parece que refleja lo que no sé si soy capaz de decir con palabras. ¡¡¡¡¡¡Siempre mil gracias por esta y por todas las fotos Celeste!!!!!
¡¡¡Esta actuación la he disfrutado desde el primer ensayo hasta el último momento, cuando me puse a girar varias veces en la rotonda de Astorga porque me sentía pletórica de Vida!!! Me encantó que vinieran a vernos nuestras amigas, Belén y Laura, con las que empezamos danza hace ya más de dos añitos y que aún no nos habían visto bailar y recordaban sólo las payasadas de clase. No se creían que las que estábamos ahí arriba fuéramos nosotras. ¡¡Gracias por venir!!
Y esta ha sido la primera vez que bailábamos con una componente nueva del grupo: ¡¡Vero, bienvenidaaaaaaaaaaaaaa!! ¡¡¡¡¡ Eres muy lindita!!!!! Mil gracias por estar tan pendiente de todas nosotras en los cambios de vestuario y en nuestras carreras. Yo creo que ha sido la primera vez que no me he agobiado con los cambios porque tú lo hacías muy fácil, porque tú estabas allí... ¡¡Gracias de todo corazón!! Agradecer también a Jairo que estuviera allí, dándonos la mano a todas cuando subíamos y bajábamos del escenario, que era no alto, sino altísimooooooooooooooooo!!!! Y pendiente de los sables, de las velas... de nosotras!! Muaks!!!
Y quiero darle un besito muy especial a mi amiga Elena, que vino una semana a estar conmigo desde Valencia y me vió bailar ( me ha visto in situ, pero aún no se cree que me suba con Morganita destapada a un escenario) y encima nos grabó los vídeos, nos recogió lo que íbamos dejando por ahí, nos ayudaba a sacar maletas, nos decía la hora, nos, nos, nos...
Ha sido muy especial ver que te emocionabas mientras yo ensayaba y que te reías cuando rompí mi lámpara del salón con mi katana. Esto es la Amistad. Compartir momentitos así. Quiero que encuentres algo que te llene tanto como a mí me llena la danza y que seas feliz, muy feliz, porque te lo mereces...