viernes, 23 de septiembre de 2011

SHIFU



...es el término con el que suele llamarse en China a los Maestros de Artes Marciales y así es cómo nos dijo Agustín, mi profesor de Tai Chi, que podíamos llamarle.


El Tai Chi Chuan es un antiguo arte marcial que se utilizaba en la batalla, aunque hoy se realiza con movimientos muy suaves y lentos y aquél significado se ha ido desvirtuando, aunque yo tengo mucha suerte porque mi Shifu es experto en artes marciales, así que sé que le devolverá a nuestro Tai Chi su verdadera esencia.


Que en tres días de clase ya esté con este rollito zen tiene un sólo culpable: Mi Shifu. Es así de fácil. Cuando alguien vive lo que enseña, lo vive de verdad, de corazón y en su interior, y te lo transmite para que tú así lo sientas, no puede más que engancharte a contínuar en esa línea... Todo fluye y encaja. Si dejas que así suceda. Y si encima te hace muy feliz, tienes ganas de más y no te quedas en una hora de clase, sino que lo llevas al resto de tu día a día.


Sé que este es el momento de mi Vida en el que debía practicar Tai Chi. Mi día a día en un sin parar contínuo, y estar atenta a muchas personas que entran y salen de la tienda, así que este tiempo de relajación interior y de concentración en el movimiento de la energía que fluye, es en lo mejor que puedo utilizar mi tiempo libre...


Quiero paz en mi Vida, en mis relaciones, en mis espacios exteriores e interiores y sé que éste es el momento perfecto para conseguirlo, y como siempre contagiar de ello a quien se acerque.