Aunque a veces estás saturada de mil cosas y necesitas descansar, la alegría de tus alumnas al subirse a un escenario, sus ganas, su magia al unirnos en el mismo baile, la felicidad de girar sobre nosotras mismas y verlas ahí, detrás de ti, bailando con una intensidad inmensa, hace que olvides el cansancio y quieras seguir adelante.
Porque su confianza en mí es total y yo debo corresponderlas. Así funciona la danza tribal ATS y si me olvido, ellas me recuerdan lo que antes yo les enseñé... Y todo vuelve a encajar.
¡¡Gracias por subir al escenario!!