miércoles, 21 de enero de 2009

Disimular...


La clase de ayer fue realmente fantástica...

El aplauso nació de todas,

para nuestra profe

y para nosotras mismas,

por el trabajo realizado...



Alguien creyó que estaba malita

pero estaba triste porque ella no estaba...



Mi alma gemela del baile,

de los ensayos,

de amar el baile

y la música,

de risas góticas

y shishas de madrugada...



5 comentarios:

Isabel dijo...

;) cómo emocionan esos aplausos espontáneos... es curioso como ese gesto que se me antoja muy musical puede expresar tanto a veces...

Naida dijo...

Esos momentitos son los que hacen un mundo...me alegro de que te haya salido este escrito pues quiere decir que lo has sentido...otro trocito de vida que merece la pena

Besos

Anónimo dijo...

Tienes un premio en mi blog
bssssssssss

Anónimo dijo...

Esos momentos son increíbles, auténticos.

Mil besos lunáticos

Ra dijo...

GRACIAS

Gracias, ante todo, pero esos aplusos que os los dedico yo a vosotras desde mi corazón, por seguir al pie del cañon junto a mi. Me enorgullece teneros a mi lado me dais tantas satisfaciones...

GRACIAS A TODAS y especialmente a tí, Chayo, porque demuestras lo que eres.

GRACIAS.